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domingo, 6 de febrero de 2011

Martin

Vino Martin a almorzar. Tomy está en la playa, vuelve recien mañana. Se lo pierde. Y bueno, que me mire en este Blog, que para eso lo escribo.
 Parece ser un tipo decente. Creo que nos vamos a llevar bien. Por suerte me ahorró toda esa parte de: "Ui, que chiquitito, me da miedo tocarlo..." Chiquito, las pindongas! Un mes me costó ser lo que soy y a mucha honra! No seré el Rey de la Selva todavía, pero tengo lo mío. Hoy seguí ensayando eso de maullar y ya me salen (a veces) sonidos cuasigatunos. Ya van a ver!
Dice Martin que tengo los ojos celestes. No sé si no irán a cambiar con el tiempo. En realidad yo aspiro a tener el famoso "ojo de gato", que brilla en la oscuridad y aterroriza a mis presas. Pero, por ahora, convengamos que tengo lindos ojos. Una amiga de Papi, Marti, dijo que tengo ojos grandes. Por ahí es el contraste con mi hermoso hocico rosa que se destaca, no sé, pero la verdad es que parece que le gusto a todos. Papi tambien me presentó a un amigo de él en Canadá, que tiene una perrita preciosa. Pero eso es otro tema.
Volviendo a Martin, me pareció un fenómeno. Cariñoso, juguetón, todo bien. Me da pena que lo pueda disfrutar tan poco. Y que se vaya a Alemania en pocas semanas, ni me lo recuerden que me pongo a llorar acá nomás. Las separaciones me entristecen, como a todo gato. Sé que es una gran oportunidad laboral y que va a ser un señor muy importante allá en Alemania, pero no va a poder acariciarme ni jugar conmigo. Y la camarita de Skype es bárbaro, pero como todos sabemos, no es lo mismo.
Por suerte Martin sacó fotos de Papi, asi lo puedo compartir con Ustedes.

Dice que es feliz conmigo. La verdad es que sonríe un montón y eso es muy bueno.

Nos gusta jugar al "agarrame si puedes"



Es divertido. La verdad que el de arriba me debe querer mucho porque me mandó padres adoptivos que son buena gente. Me cuidan y me juegan, que más pude pretender un gato de la vida, ehh?

Pero, lo estuve pensando, me gusta la seriedad y creo que voy a ser FEROZ.



Tengo pasta, no les parece? Por ahí necesito ensayar un poco más, pero creo que cuento con lo básico. Como te decía: FEROZ. Otros quieren ser bombero o maestro. A mí me sienta mejor el rol de Gato Feroz.

Bueno, basta de divagues, volvamos a las cosas importantes. Hoy ya como bastantes piedritas del alimento balanceado. Y claro, voy siendo cada vez más grande.

El problemita que tengo hoy en día es el acceso. No sé si mi cuellito es un poco corto o el plato demasiado alto, el asunto es que la forma más práctica que encuentro es entrando en el platito para comer. Podría, a simple vista, no ser elegante, pero Papi y Mami me lo festejan y si a ellos le gusta es que está todo bien. El único problemita que le veo es que Mami me tiene que limpiar las patitas cuando salgo del plato.
Nadie dijo que iba a ser sencillo la vida de gato!

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